Saturday, September 20, 2008

¿Y dónde están los verdes cuando se les necesita?




El día de ayer leí con mucho interés una nota del estimado Alfred Kaltschmitt sobre la contaminación en el lago de Atitlán. Alfred se pregunta, al igual que yo, dónde están los "ambientalistas" para protestar y exponer el problema de la contaminación en el lago cuando han estado haciendo muchísimo ruido sobre la minería y extracción petrolera.

Y digo yo, dónde están los #$%" verdes cuando se les necesita? El caso del lago es uno, que llora sangre y estoy de acuerdo con el amigo Kaltschmitt. Pero hay otras situaciones en nuestra Guatelinda que lloran sangre y los verdes... ni vistos ni oídos.

La contaminación del aire en la ciudad de Guatemala es un tema serio y de consecuencias graves, al cual nadie, ni la Muni, ni el gobierno ni los verdes le han puesto "coco". El laboratorio de monitoreo ambiental de la Universidad de San Carlos publica de vez en cuando los resultados de su trabajo, sin que la cosa pase a mayores consecuencias. Pero lo cierto es que, en el tema de las partículas sólidas en suspensión en el ambiente, Guatemala Ciudad está muy por arriba de lo que la OMS indica como "aceptable" y de hecho, los niveles de contaminantes están en el punto de "salga corriendo".

Las partículas sólidas, los óxidos de azufre y algunos otros contaminantes son producidas por los automotores, principalmente por los vehículos con motor diesel (léase "buses del servicio urbano") los cuales, como regla, están en muy mal estado de funcionamiento y expelen unas grandes nubes de humo negro. De menor visibilidad pero no menor peligrosidad, los óxidos de nitrógeno son emitidos por todos los vehículos, a diesel y gasolina, sin convertidor catalítico.

En los años 90 se emitió una ley que obligaba al uso de la gasolina sin plomo y a la importación de vehículos equipados con equipo de control de emisiones. Tal ley parece estar archivada en algún rincón de la Biblioteca Nacional, porque nadie está velando por su cumplimiento: una de las provisiones contenidas en su texto era la revisión periódica de los vehículos para verificar el cumplimiento de los estándares de emisiones permitidas.

Como en Guatemala no se hace cumplir la ley y todo el mundo hace lo que le da la gana, han entrado al país todo tipo de vehículos vetustos (por viejos) que no cumplen los estándares y también se importan vehículos nuevos, como el infame Suzuki Marutti, que tampoco tienen los equpos reglamentarios.

¿Dónde están los verdes? digo yo de nuevo. Ýo me puedo permitir hablar contra el uso de un Suzuki Maruti (y no tengo nada contra Suzuki ni su importador, es sólo un ejemplo) porque no estoy en ningún concurso de popularidad pero me imagino que los verdes no quieren hablar nada al respecto (si es que ya apareció en su radar, lo cual también dudo) porque, sencillamente, no serían populares ni hay dinero en esa causa.

Y ese es el problema. Yo no hago un secreto del hecho de que, por ejemplo, no simpatizo con Greenpeace. Ellos se hicieron notorios protestando contra las pruebas nucleares francesas, pero yo quisiera ver si se aparecen a boicotear la fábrica de Suzuki en la India donde fabrican el Maruti, un vehículo sí, económico y barato pero contaminante por su tecnología obsoleta.

¿Será la protección al medio ambiente lo importante? ¿O serán consideraciones monetarias y políticas? Mmmmmm. Un tema de pensamiento crítico en realidad.

1 comment:

PROSÓDICA said...

Qué bueno fue toparse con este blog. De acuerdo con vos en cuanto a que muchos de los ambientalistas en nuestro país parecen chinchines ambulantes: mucho ruido y poca acción. Las personas se quejan, se quejan y se quejan, pero casi nadie propone o crea un movimiento nacional que verdaderamente gener cambios a nivel gubernamental, proponiendo leyes o creando instituciones que velen por su correcta aplicación, que capaciten y sensibilizen a quienes toman las decisiones, a los alumnos en escuelas. No sé, mucha bulla pero poco fondo.